Posibles Variantes al Momento de Resolver el Capítulo 5
Cuando iniciamos una auditoria interna ISO 14001 debemos recordar que el Liderazgo debe ser demostrado en todo el ciclo PDCA. Por lo tanto debemos evaluar la conformidad en distintas instancias, recolectando evidencia principalmente a través de las entrevistas con los colaboradores y la observación de la cultura organizacional.
En esta versión de la ISO 14001 se pretende dar mayor protagonismo a la labor que realiza la alta Dirección dentro del Sistema de Gestión Ambiental. De esta manera, se busca una mayor participación a través de las siguientes directrices normativas:
- Asumiendo la responsabilidad y la rendición de cuentas con relación a la eficacia del sistema de gestión ambiental.
- Asegurándose de que se establezcan la política ambiental y los objetivos ambientales, y que éstos sean compatibles con la dirección estratégica y el contexto de la organización.
- Asegurándose de la integración de los requisitos del sistema de gestión ambiental en los procesos de negocio de la organización.
- Asegurándose de que los recursos necesarios para el sistema de gestión ambiental estén disponibles.
- Comunicando la importancia de una gestión ambiental eficaz y conforme con los requisitos del sistema de gestión ambiental.
- Asegurándose de que el sistema de gestión ambiental logre los resultados previstos.
- Dirigiendo y apoyando a las personas, para contribuir a la eficacia del sistema de gestión ambiental.
- Promoviendo la mejora continua.
- Apoyando otros roles pertinentes de la dirección, para demostrar su liderazgo en la forma en la que aplique a sus áreas de responsabilidad.
El 5.1 podrá verificarse principalmente con la dirección, quien deberá demostrar su grado de involucramiento con el SGA.
La Política Ambiental en la Auditoria Interna ISO 14001
La Política Ambiental es la declaración de la Dirección de la organización, donde define sus intenciones y compromisos en relación al medioambiente. Esta política influirá en todas las actividades que se desarrollan en la empresa, ya que determinará los principios fundamentales de respeto al medioambiente en todos los niveles organizativos.
El 5.2, referido a la política ambiental, deberá verificarse primero documentalmente de forma tal que exhiba los distintos compromisos demandados por la norma, así como su eficaz comunicación. Podrían auditarse conjuntamente otras cláusulas como el control de la información documentada (7.5.3), la comunicación (7.4), la toma de consciencia de los trabajadores al respecto (7.3), entre otras.
Al evaluar el 5.3, en general se espera ver documentos tales como organigramas, matrices de asignación de responsabilidades (RAM), perfiles de puestos, matrices de polivalencia, etc. Muchas veces, también se encuentra este requisito vinculado con el de competencia (7.2).
Es posible que los roles y responsabilidades específicos mencionados en el 5.3 sean asignados a un individuo, quien se denomina con frecuencia “representante de la dirección”. No obstante, siempre recordar que quien deberá rendir cuentas sobre la eficacia del SGA será siempre la alta dirección.